Alfonsina Storni (Poemas)
Hombre
pequeñito
Hombre pequeñito, hombre pequeñito,
Suelta a tu canario que quiere volar...
Yo soy el canario, hombre pequeñito,
déjame saltar.
Suelta a tu canario que quiere volar...
Yo soy el canario, hombre pequeñito,
déjame saltar.
Estuve en tu jaula, hombre pequeñito,
hombre pequeñito que jaula me das.
Digo pequeñito porque no me entiendes,
ni me entenderás.
hombre pequeñito que jaula me das.
Digo pequeñito porque no me entiendes,
ni me entenderás.
Tampoco te entiendo, pero mientras tanto
ábreme la jaula que quiero escapar;
hombre pequeñito, te amé media hora,
no me pidas más.
ábreme la jaula que quiero escapar;
hombre pequeñito, te amé media hora,
no me pidas más.
TAREA 1
1.
¿Por qué el yo poético habla de “hombre pequeñito”?
2.
¿Cómo se simboliza la opresión de la mujer?
3.
¿Cómo es la comunicación entre ambos?
4.
¿Qué le pide el yo poético al “hombre pequeñito” al
final del poema? ¿Es obligado tener que amar eternamente a la misma persona?
La loba
Yo soy como la loba.
Quebré con el rebaño
Y me
fui a la montaña
Fatigada del llano.
Yo tengo un hijo fruto del
amor, de amor sin ley,
Que no pude ser como las
otras, casta de buey
Con yugo al cuello; ¡libre
se eleve mi cabeza!
Yo quiero con mis manos
apartar la maleza.
Mirad cómo se ríen y cómo
me señalan
Porque lo digo así: (Las
ovejitas balan
Porque ven que una loba ha
entrado en el corral
Y saben que las lobas
vienen del matorral).
¡Pobrecitas y mansas
ovejas del rebaño!
No temáis a la loba, ella
no os hará daño.
Pero tampoco riáis, que
sus dientes son finos
¡Y en el bosque
aprendieron sus manejos felinos!
No os robará la loba al
pastor, no os inquietéis;
Yo sé que alguien lo dijo
y vosotras lo creéis
Pero sin fundamento, que
no sabe robar
Esa loba; ¡sus dientes son
armas de matar!
Ha entrado en el corral
porque sí, porque gusta
De ver cómo al llegar el
rebaño se asusta,
Y cómo disimula con risas
su temor
Bosquejando en el gesto un
extraño escozor...
Id si acaso podéis frente
a frente a la loba
Y robadle el cachorro; no
vayáis en la boba
Conjunción de un rebaño ni
llevéis un pastor...
¡Id solas! ¡Fuerza a
fuerza oponed el valor!
Ovejitas, mostradme los
dientes. ¡Qué pequeños!
No podréis, pobrecitas,
caminar sin los dueños
Por la montaña abrupta,
que si el tigre os acecha
No sabréis defenderos,
moriréis en la brecha.
Yo soy como la loba. Ando
sola y me río
Del rebaño. El sustento me
lo gano y es mío
Donde quiera que sea, que
yo tengo una mano
Que sabe trabajar y un
cerebro que es sano.
La que pueda seguirme que
se venga conmigo.
Pero yo estoy de pie, de
frente al enemigo,
La vida, y no temo su
arrebato fatal
Porque tengo en la mano
siempre pronto un puñal.
El hijo y después yo y
después... ¡lo que sea!
Aquello que me llame más
pronto a la pelea.
A veces la ilusión de un
capullo de amor
Que yo sé malograr antes
que se haga flor.
Yo
soy como la loba,
Quebré con el rebaño
Y me
fui a la montaña
Fatigada del llano
TAREA 2
1.
¿Por qué crees que Alfonsina Storni ha
titulado así este poema?
2.
¿Cómo llama al resto de las mujeres?
¿Por qué?
3.
¿Qué crees que simboliza el corral y el
matorral?
4.
¿Qué representa la figura del pastor?
5.
¿Quiénes son los dueños?
6.
¿Qué crees que quiere decir “Y me fui a
la montaña/fatigada del llano”
7.
¿Qué cualidades tirene “la loba”? ¿Qué
tipo de mujer crees que representa?
8.
¿Cuál es tu opinión sobre los dos
perfiles de mujer que aparecen en el poema?
Tú
me quieres blanca
(…)
Tú que el esqueleto
Conservas intacto
No sé todavía
Por cuáles milagros,
Me pretendes blanca
(Dios te lo perdone),
Me pretendes casta
(Dios te lo perdone),
¡Me pretendes alba!
Huye hacia los bosques,
Vete a la montaña;
Límpiate la boca;
Vive en las cabañas;
Toca con las manos
La tierra mojada;
Alimenta el cuerpo
Con raíz amarga;
Bebe de las rocas;
Duerme sobre escarcha;
Renueva tejidos
Con salitre y agua;
Habla con los pájaros
Y lévate al alba.
Y cuando las carnes
Te sean tornadas,
Y cuando hayas puesto
En ellas el alma
Que por las alcobas
Se quedó enredada,
Entonces, buen hombre,
Preténdeme blanca,
Preténdeme nívea,
Preténdeme casta.
Conservas intacto
No sé todavía
Por cuáles milagros,
Me pretendes blanca
(Dios te lo perdone),
Me pretendes casta
(Dios te lo perdone),
¡Me pretendes alba!
Huye hacia los bosques,
Vete a la montaña;
Límpiate la boca;
Vive en las cabañas;
Toca con las manos
La tierra mojada;
Alimenta el cuerpo
Con raíz amarga;
Bebe de las rocas;
Duerme sobre escarcha;
Renueva tejidos
Con salitre y agua;
Habla con los pájaros
Y lévate al alba.
Y cuando las carnes
Te sean tornadas,
Y cuando hayas puesto
En ellas el alma
Que por las alcobas
Se quedó enredada,
Entonces, buen hombre,
Preténdeme blanca,
Preténdeme nívea,
Preténdeme casta.
TAREA 3
1. ¿A
quién se dirige el “yo poético”? ¿Con
qué vocativo lo nombra?
2. ¿Qué
le pide el yo poético?
3. ¿Cuál
es la carencia que tiene “el buen hombre”? ¿Por qué no se merece una mujer
blanca, nívea y casta?
4. Continúa
el poema :
Preténdeme ………
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